Evaluación de riesgos por flujo de detritos en las asociaciones Nueva Barranquilla y Wari del distrito Ciudad Nueva - Tacna 2021

Abstract

En febrero del año 2020 se activó la quebrada Caramolle después de más de 50 años debido a precipitaciones intensas mayores a 10mm, conllevando a que las viviendas emplazadas en el cauce de la quebrada provoquen daños humanos y materiales, en el presente informe se pretende evaluar el nivel de riesgo ante el peligro de flujo de detritos en las asociaciones de vivienda Nueva Barranquilla y Wari del distrito Alto de la Alianza, en la provincia y región de Tacna, para ello será necesario caracterizar el peligro en función a parámetros de evaluación (velocidad y volumen) y susceptibilidad del territorio que involucra factores desencadenantes y condicionantes, los factores desencadenantes se resume a precipitaciones intensas y los factores condicionantes a elementos como la geología, geomorfología y pendiente, que aplicando matrices Saaty mediante comparación de pares se desprende que la zona evaluada tiene el nivel de peligro muy alto. La vulnerabilidad en la zona de estudio considera dos dimensiones el social y económico, el social abarca el factor exposición y resiliencia, la exposición incluye parámetros como grupo etáreo, discapacidad y servicios básicos, mientras que la resiliencia tiene como parámetros al nivel educativo, capacitación en temas de GRD (Gestión del riesgo de desastres) y actitud frente al riesgo. La aceptabilidad o tolerancia al riesgo respecto a la valoración de consecuencias es medio debido a que pueden ser gestionadas por recursos disponibles, en cuanto a la valoración de la frecuencia es alta, es en función a la valoración de consecuencias y la frecuencia que se concluye que el nivel de consecuencias y daños es alto, el cual es inaceptable y se deberá de desarrollar actividades de aplicación inmediata y prioritarias para el buen manejo y control de riesgos. Como medidas de protección para mitigar el riesgo se recomienda medidas estructurales de protección que puedan disipar la energía y volumen de agua, el cual estará supeditado a un estudio geológico - geotécnico e hidrológico y medidas no estructurales que comprende la capacitación y fortalecimiento de la gestión de riesgos de desastres naturales.