Violencia Familiar, Medidas de Protección y su Cumplimiento por el Estado, Lima Este - 2018

Abstract

Para poder entender el contexto en el que se desarrolla la violencia familiar (en adelante VF), se hace la referencia inicialmente para entender el significado de la familia, es decir aquella cedula básica de la sociedad en la que se desenvuelven los padres, los hijos y otras personas que la conforman, ya sea por lazos de consanguineidad o afinidad. Es en este ámbito, donde la violencia familiar se desarrolla, comprendida como las agresiones o afectaciones que afectan a los integrantes de la misma, y como se puede ver, en los últimos años, la VF se ha extendido de tal manera que, en la sociedad actual, los medios de comunicación, informan prácticamente a diario, situaciones referidas a este tema y de naturaleza similar y de mayor complejidad inclusive, tales como feminicidios, homicidios de menores, abuso, entre otros. Respecto a lo anterior, es tanto el Ministerio de la Mujer, como el conjunto del aparato estatal en su integridad los que deben plantear acciones para combatir dichas situaciones, tanto desde un punto de vista legal como social, en el entendido del primer punto que, las normas y procedimientos se den al respecto, no solo deben ser adecuadas a la realidad en que se vive, sino que debe velarse por su eficacia, en el sentido que los plazos y procedimientos que se lleven a cabo, desde el conocimiento de los hechos de VF, por parte de las autoridades, hasta la toma de medidas efectivas, debe darse en los menores tiempos posibles, lo cual demostraría que efectivamente, en palabras de los justiciables, “se está haciendo justicia”. Un caso que debe considerarse en estos temas es el hecho que, por ejemplo, para el uso de la cámara Gessel en el caso de menores que han sufrido algún tipo de violencia, ésta debe llevarse a cabo en presencia del psicólogo, fiscal del turno, fiscal de familia, defensores de la víctima y defensor del imputado o uno de oficio a falta de este último, así como con la presencia del instructor policial a cargo de las investigaciones encargadas. Esta cantidad de personas que deben estar en un determinado momento para llevar a cabo dicha diligencia, genera una serie de complicaciones, teniendo en cuenta como por ejemplo en Lima solo existen 4 cámaras operativas, lo cual ahonda en la dificultad para resolver oportunamente los procesos de VF.