Relación de la cultura organizacional con el comportamiento laboral en el proyecto minero Las Bambas en el Distrito de Chalhuahuacho Cotabambas Apurimac – 2017

Abstract

Cuando hablamos de organización nos estamos refiriendo a dos o más personas que se unen para realizar una cooperación y alcanzar objetivos comunes; siendo casi evidente no lograr estos objetivos de manera individual. El ser humano pertenece a los primates, por lo tanto es por naturaleza gregario, conforma instituciones para organizarse, y todo tiene sentido en función a la colectividad. Partiendo de la premisa anterior, es menester mencionar que el logro de esos objetivos grupales sólo puede realizarse si los miembros que interactúan en las organizaciones establecen un comportamiento y/o acto psicológico lo necesariamente fuerte para que les permita interactuar en la organización, estilos de comunicación; comportamientos, creencias, estilos de liderazgo, lenguajes y símbolos de la organización, etc., conforman estas relaciones entre los seres humanos. Los elementos antes mencionados, agrupan a lo que se conoce como Cultura Organizacional o Cultura Corporativa, dice al respecto Serna (1997) “… la manera cómo las organizaciones hacen las cosas, cómo establecen prioridades y dan importancia a las diferentes tareas empresariales”. La Cultura Organizacional condiciona el comportamiento de los miembros dentro de las organizaciones, los cuales determinan los recursos “…… enraizamiento, arraigo y permanencia” (Guedez 1998), generando en él “… eficacia, diferenciación, innovación y adaptación”. En la cultura organizacional, en sus componentes, es una de las más importantes en la conformación de la organización, si ésta no se desarrolla adecuadamente constituye una de las principales debilidades. Es por ello que, de presentarse la Cultura Organizacional como una debilidad, la organización tendrá que “… definir programas que modifique los elementos culturales que impiden su desarrollo….” (Serna 1997). Es evidente que el recurso humano tiene muchos problemas para lograr una identificación con la organización y desarrollar un clima de trabajo que motive y sensibilice. La Cultura Organizacional, es a no dudarlo, el eje globalizante de todas las organizaciones y, por lo tanto es uno de los factores determinantes en la eficacia del recurso humano; del desarrollo pleno de ella dependen los niveles de productividad y el clima organizacional en que se apoyan y se materializan los objetivos. En el Proyecto Minero Las Bambas en el distrito de Chalhuahuacho Cotabambas – Apurimac, es donde se encuentran principalmente dos tipos de trabajadores en el área administrativa: nombrados y contratados. Se manifiestan diferencias con respecto a las labores propias de cada puesto de trabajo, indicando que se desarrollan y desenvuelven por sus propias condiciones y decisiones. El personal contratado se ve afectado por diversos factores que afectan su eficacia, entre ellos son están los diferentes estilos de liderazgo, la comunicación, la inseguridad de su permanencia, etc.; todo ello genera descontento que evidentemente afecta a los ambientes de trabajo. Esto se traduce en el desarrollo de climas de trabajos ambiguos y tensos, por lo tanto los comportamientos se tornan apáticos ante la incertidumbre que esto genera en la organización. Considerando el planteamiento del párrafo anterior, emerge la necesidad de analizar e investigar la Cultura Organizacional y el Clima Laboral, los resultados a que resulten permitirán elevar los niveles de productividad y excelencia de los mismos, promoviendo un clima de trabajo motivante que permita al personal nombrado y contratado desarrollar una labor de equipo para concretizar los objetivos de la organización.