Aireación de micronanoburbujas para reducir aceites y grasas lubricantes de aguas residuales del centro automotriz EL PAISA, Los Olivos-2016

Abstract

Algunos de los contaminantes que más problemas causan en el tratamiento de aguas residuales, son los aceites y grasas, la presencia de estas en los efluentes industriales, no solo provocan problemas en su tratamiento, sino que también, dan lugar a la contaminación del suelo y los cuerpos de agua donde éstas son descargadas. Los aceites y grasas que son altamente estables, inmiscibles con el agua [...] [por lo tanto] van a permanecer en la superficie dando lugar a la aparición de natas y espumas. Éstas natas entorpecen cualquier tipo de tratamiento, biológico o físico-químico, por lo que, es recomendable que los aceites y grasas sean eliminados en los primeros pasos del tratamiento de las aguas residuales (Vidales et. al., 2009). En el centro automotriz “El Paisa” ubicado en el distrito de Los Olivos, descargan grandes volúmenes de aguas con aceites y grasas a su alcantarilla. Este centro automotriz ofrece el lavado y cambio de aceite de motos lineales y de tres ruedas. Estas actividades remueven partículas, sustancias oleosas e hidrocarburos, junto con los detergentes que fueron usados para el lavado de los vehículos menores mencionados además que durante el cambio de lubricante, se producen derrames que contribuyen al aumento de la concentración del contaminante. Ya sabiendo que los aceites y grasas causan efectos negativos en el cuerpo que las recibe, no se puede permitir que lleguen a la alcantarilla sin que la sustancia oleosa sea tratada y reducida en su totalidad, o en su mayor porcentaje. Otro de los problemas es la falta de conocimiento sobre las consecuencias que ocasionan el no tratar estos efluentes; el auge de ventas de vehículos, genera a su vez mayor demanda de este servicio, por tanto, las aguas residuales de estos establecimientos incrementan. En el 2013 se registró un total de 68,718 unidades de vehículos menores, representando el 4.53% del parque automotor de la capital, que crece con una tendencia de 3.99% por año (Ministerio de transportes y Comunicaciones, 2013) Cada vehículo se lava por lo menos una vez al mes y en promedio se gasta 60 a 70 litros de agua por vehículo menor lavado (Universidad católica, 2012).